“Etéreo deponer…”
La lluvia cae… mírala correr, desierta esta la calle y las nubes
ocultaron a mi lucero azul…que hacer, si todo lo arrastra, hasta
tus huellas ha borrado, las de frente de mi casa y esta brisa que
la acompaña… tu aroma remueve mi piel, al ver que ya no estas
se eriza por la frialdad que deja al pasar…se escucha un zumbido
al parecer llega el invierno sin ti
La lluvia ceso… pero ha cambiado el tiempo y con el se han removido
Los sentimientos, he buscado y no encuentro, sé que me faltas tú…la
escarcha cubre mis palabras y mi voz hiere… fría, determinante, cruda
destruyendo el idilio que mantenía cálido el abrazo y como viento voló
a tiempo… no quiero ver su fracaso Dios la debe acompañar
La lluvia como testigo… te vio partir, mi lucero se ocultó para no verme
sufrir, tras las nubes grises su llanto derramo se opacaba su luz por mi
le pedía al redentor que consolaras mis momentos y fue sabio de mi
alma arranco el beso que con tanto cariño había guardado mi corazón
como recuerdo de aquel amor que un día se adueñó de mi andar, con
mi sentir, hasta de mi mirar…ya nada es personal la lluvia arrastro mi mal.
La lluvia cae… mírala correr, desierta esta la calle y las nubes
ocultaron a mi lucero azul…que hacer, si todo lo arrastra, hasta
tus huellas ha borrado, las de frente de mi casa y esta brisa que
la acompaña… tu aroma remueve mi piel, al ver que ya no estas
se eriza por la frialdad que deja al pasar…se escucha un zumbido
al parecer llega el invierno sin ti
La lluvia ceso… pero ha cambiado el tiempo y con el se han removido
Los sentimientos, he buscado y no encuentro, sé que me faltas tú…la
escarcha cubre mis palabras y mi voz hiere… fría, determinante, cruda
destruyendo el idilio que mantenía cálido el abrazo y como viento voló
a tiempo… no quiero ver su fracaso Dios la debe acompañar
La lluvia como testigo… te vio partir, mi lucero se ocultó para no verme
sufrir, tras las nubes grises su llanto derramo se opacaba su luz por mi
le pedía al redentor que consolaras mis momentos y fue sabio de mi
alma arranco el beso que con tanto cariño había guardado mi corazón
como recuerdo de aquel amor que un día se adueñó de mi andar, con
mi sentir, hasta de mi mirar…ya nada es personal la lluvia arrastro mi mal.
- Autor: Nicolas Ramos Lopez ( Offline)
- Publicado: 6 de febrero de 2016 a las 07:25
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 43
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni
Comentarios1
El tiempo junto a la vida, pasa... Nada se detiene, la vestisca viene, la ventisca hiere, el dolor de un amor perdido que se pierde, un dolor que se ausenta entre la nieve, y no hay nieve, cesa la lluvia y el dolor depone el dolor, porque sino, muere. Nada alivia, el recuerdo sigue vivo, espera en silencio que vuelva la tormenta, y siga borrando las huellas de la calle, de tu frente, de tu casa, pero jamas borrará las huellas que quedaron impresas en el sitio donde amaron las almas. Felicitaciones, grato paisaje leer tu poesía. raquelinamor
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