La tristeza tan clara como sus lágrimas,
Hacían que el reflejo de mi soledad
Se desvaneciera por el lamento
Que era imposible evitar…
Le tome de la mano,
A su lado quería estar,
El adiós…
Era el que se hacía esperar.
El eterno abrazo que nunca se quiere acabar,
Corre por mis ganas,
Pero los dos sabemos que es el final.
Un Adiós que deja la esperanza de algún día volverse a encontrar…
- Autor: Rodrigo Pizarro ( Offline)
- Publicado: 23 de febrero de 2016 a las 01:02
- Categoría: Triste
- Lecturas: 90
Comentarios1
Amores tan profundos, nuncan mueren , sólo se transforman.
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