Si tan sólo pudiera medir un día,
el dolor de una caricia ausente,
el sentir de unos labios lejanos,
el añorar un abrazo apretado,
que lo sientes cercano
y no perdido cual más alejado.
Entonces pudiera decir
que te sientes frustrado
y que te inundó la lejanía
estando tan cercana las ansias mías
sin haberte besado.
No me importarías
que estuvieras cansado
de estar de pie
y cambiando de flores
y de amores.
Porque no quiero ser rastro
de tus sombras.
Yo soy la constante
que te nombra,
cuando en tu hombro
sienta el calor de amante
ese que se siente
en el añorado instante.
No dudes que te pienso
y que vives en mi,
que eres atención diaria
sabiendo que el amor
es la fuerza necesaria.
Me dejaría apretar mil veces,
como ola y mar si en tu fuerza
traes la inmensidad de amar.
Ven y dejaré mis ganas
en tu cuerpo gravitar.
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Autor:
nellycastell (
Offline) - Publicado: 25 de febrero de 2016 a las 12:31
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 95
- Usuarios favoritos de este poema: nellycastell, Max Hernandez, Myriam Estrella B, Henyer, kavanarudén, María C.
Offline)
Comentarios5
Bellos versos
Que Agradable Es Regresar Y Poderme Embelesar Con Sus Versos Nuevamente 😉
Precioso.
Sentimientos profundos expresados en tu versar.
Una ausencia que se recuerda, que en el fondo no es ausencia porque continua a vivir en ti
Un gusto leerte y poder comentarte.
Kavi
Muy hermoso poema, Nellycastell, donde abunda la melancolía por los abrazos ausentes. Felicito tu inspiración y te dejo mi saludo cordial.
Ingrid Zetterberg
Abrazos ausentes, cómo se echan en falta amiga mía
Un abrazo en la distancia que te llegue intacto
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