Pues que Dios siempre da facilidades,
cuando vuelva a nacer será distinto
demostrando lealtad a sus verdades.
Caso omiso he de hacer a veleidades
ornadas de pelaje variopinto
y por ende también a indignidades
y a los malos consejos de mi instinto.
Y a los guiños que me hacen las beldades,
a besos del malvado vino tinto,
la castidad, ¡adiós a liviandades!
sin distraerme en este laberinto.
Prometo renunciar a vanidades
y cuando de sospecha quede extinto,
denunciar a las malas amistades.
©donaciano bueno
http://www.donacianobueno.com/
- Autor: donbuendon (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 27 de julio de 2016 a las 02:36
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 14
- Usuarios favoritos de este poema: un poeta lirico
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.