Yo, no quiero ser uno más, simple abeja en la colmena,
un ser con un alma buena que va caminando a ras
de este mundo en que quizás vivir no valga la pena
arrastrarse por la arena o avanzando para atrás.
Que vivir es respirar, eso es cierto, es bien sabido,
como un soplo es relamido por el aire en el desierto,
o el dormir a cielo abierto pusiera ser desmedido,
dudando de haber venido a este mundo tan incierto.
Y pues que no hay elección, habremos de hacer camino
hasta llegar al destino sin ninguna dilación,
con la gula del glotón disfrutando del buen vino,
si es que ha de ser nuestro sino bendita esta bendición.
A veces melancolía y a ratos la frustración,
una pena, esa emoción, un llanto en una agonía,
del despertar la alegría, o aun la desesperación
cuando llueve, una canción, el rezo en la sacristía.
Así es el día tras día y así el tiempo va pasando,
nuestro alrededor mirando todo lo que el viento arrasa,
con temor, con fina guasa, a unos y a otros criticando
y el recuerdo va robando a la esperanza su grasa.
©donaciano bueno
http://www.donacianobueno.com/
- Autor: donbuendon (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de agosto de 2016 a las 02:51
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 27
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