Hacer mía quisiera la noble misión
del árbol de la barranca oriundo;
él que junto al arroyo se dio
y en sus tierras enraizó profundo;
él que su existencia nutrió
en tiempos mansos e iracundos,
con lo que el cielo llovió de Dios
y el arroyo arrastró del mundo.
Aquel que entre montañas se alzó
con ferviente anhelo fecundo,
de con su copa tocar a Dios
y con sus ramas abrazar al mundo.
- Autor: Carlos Del Real (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de abril de 2016 a las 15:50
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 87
- Usuarios favoritos de este poema: Faunito, Dulce
Comentarios1
Bellísimos versos Carlos, gracias por tu amistad en este sitio y la estrellita en mi poema, saludos.
Gracias por leer me y por tu Dulce comentario 🙂 y tambien por hacer tuyo este poema que ya no es solo mio.
Que tengas un buen día paisana. Por cierto; De que parte de México eres?
Saludos desde California y gracias por tu amistad.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.