A mi hermano que nunca se rinde!
De hospital y escayola
fue tu infancia escaldada,
de momentos de angustia,
de tu familia angustiada
Tú en la cama tendido
sin entender qué pasaba,
y con tu madre postrada,
conteniendo sus lágrimas
De hospital y escayola
y de veranos sin playa,
de flores marchitas,
y de flor deshojada
Más te sobreviviste a ti mismo,
y forjaste tu alma
sin rencores, ni envidias,
con pasión renovada
Llegaste en tu impedimento
hasta tus cotas más altas,
siempre fiel a ti mismo,
Don Quijote de la Mancha
En tu nobleza agradeces,
sin mirar a tu espalda
y le devuelves al niño,
lo que perdiste en tu infancia
- Autor: Javier P (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de abril de 2016 a las 16:21
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 79
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., JoseAn100
Comentarios3
Felicitaciones, poeta.!!!!
Estas letras llegan al alma. Y nos devuelven la fe en la humanidad.
Gracias por compartirlas.
Saludos.
Mary.
Muchas gracias María! Me alegro mucho que hayas escrito en mi rincón.
Besos
Javier
Muchas gracias brother. Uno de los mejores regalos que me han hecho nunca.
Gracias hermano
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.