Sentido, que percibe el horizonte
vida, que enfrenta los cambios,
frágiles desafíos que aparecen
y tienen rocas esculpidas con óleo.
Se organizan los planetas vivos
en comportamiento natural festivo,
como cuando la fibra del árbol cae
y revela su historia de vida interior.
El resonante címbalo ondulante
el que se escucha en la vereda,
el ruiseñor le responde en regocijo
cantándole al lienzo del cielo.
Dos son las cosas que me inquietan
cinco son las que me animan,
tres despiertan mi vida
solo una perece al viento.
Sentido sólo sentido,
vida sólo una,
muerte también una,
ambas están parejas.
En cada instante de suspiro,
No sé, lo que sé
pero al filosofo griego Sócrates recuerdo,
extendiendo lo que en el saber está.
Descubro la respuesta, vivo
si no la descubro, muero.
Si no la encuentro,
es sólo una idea.
Se diluye en mi mente
para cautivar la pasión,
sentido sólo sentido,
el alago prodigioso.
Vivo con entusiasmo latente,
por que la vida no es vida
sin un punto de llegada,
y por que la vida no muere
si un punto de partida.
cc
- Autor: Raymond Rosa Ávila ( Offline)
- Publicado: 5 de mayo de 2016 a las 17:01
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 66
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