Niña, mujer, sorprendida
enorme, como el universo
tus ojos devoran, poco a poco
la realidad de la vida.
Sopla con el alma de tu aliento
la faz de mi tierra
y cuando llegues al mar
suave, peina mis cabellos.
Hermosa niña de los vientos
que los árboles, te saluden
dejándote pasar
seguros de tu regreso.
Hasta que en tu cintura
la luna esconda sus puntas
dejando que el sol
pariera el horizonte nuevo
en medio de cantos
y tibieza esperanzada
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Autor:
Esteban Couceyro (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 6 de mayo de 2016 a las 09:47
- Categoría: Amor
- Lecturas: 11
Offline)
Comentarios2
Como un homenaje a la vida adolescente, cuando las manos estan llenas de esperanza y la vida tiene gran sonrisa, felicidades por esta hermosa entrega poetica,
Abrazos y saludos fraternos.
Estimado amigo, la vida ya nos dió la perspectiva necesaria para ver las cosas que pasan desapercibidas, generalmente por la misma premura del vivir.
La floración de las nuevas generaciones, es una de esas cosas.
Un abrazo
Esteban
Es hermoso ver como florece la primavera en esa juventud dichosa.
Hoy a pesar del día gris tus versos son esperanzadores.
Te saludo con afecto deseando que por la noche brillen las estrellas.
No tengo envidia por esa juventud..., solo admiración esperanzada.
No creo que puedas ver las estrellas, esta noche pero imagínalas brillantes y lejanas..., siempre tan bellas...
Buenas noches
Esteban
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