Esto es diferente, aunque las ansias por verlo parecen nuevas,
ya lo he vivido; ya sentí la necesidad de la ternura de alguien más
con una intensidad que no se puede explicar.
Ya se desataron antes en mi vientre,
estas pequeñas bestezuelas aladas que producen escalofríos.
Pero me hicieron daño, y en mi interior todo
fue consumido por una densa y gélida oscuridad.
Me dejé arrastrar por un mar de odio e ira;
apagué mi humanidad y sentí como se ahogaban,
hasta desaparecer, los últimos gritos de dolor en mi interior.
En un momento de ingenuidad me creí incapaz de amar,
estaba herida y cualquier forma de evadir el sentimiento de vacío, era válido.
El dolor y el desengaño derribaron mis salvaguardas,
la moral dejó mi cuerpo,
mi entorno se volvió siniestro.
Jugué a arrancar corazones y desmembrar sentimientos,
pero solo era una distracción.
Luego de escoger y liquidar a mi víctima,
la euforia y el éxtasis de la caza se acababan
y estaba sola, otra vez,
sola con esa oscuridad dentro.
Con ese monstruo, que arañaba en mi interior,
rogándome para que lo dejara salir,
a alimentarse del sufrimiento de alguien más,
rogándome para que le dejase consumir todas las almas;
todas aquellas que cupieran por su avariciosa boca.
No era yo.
Y temo que Eso, me domine otra vez.
- Autor: whiterabbit (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 15 de mayo de 2016 a las 23:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 49
- Usuarios favoritos de este poema: Renata Jaramillo, Genaro A. Cancino
Comentarios2
La oscuridad siempre será la luz de un nuevo amanecer. Un abrazo!
¡Exacto! Podemos hallar cosas maravillosas que estaban perdidas bajo ese manto de oscuridad, que a veces nos echamos encima, solo hay que ser lo suficientemente valiente y encender la luz. Saludos!
"¡Quién no se ha sumergido en el vasto y gélido abismo de la oscuridad no puede dilucidar y apreciar la Verdadera Luz!"
Por alguna razón, me siento uno con este poema. Quizás el mismo monstruo acecha mi puerta ¡Ja!. Muy buen escrito, ¡me ha gustado en demasía!
Gracias por compartirlo con nosotros. Espero seguir leyéndole.
¡Gracias a ti por darme un poco de tu tiempo!
Y no sucumbas ante ese monstruo, se más fuerte. No dejes que Eso, te gane la pelea. Siempre encontrarás luz, si sabes donde buscar.
Saludos!
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