Romance entre la Sombra y el Alma.
Ocurre a veces, que el cuerpo se cansa de llevar
el alma y su sombra.
Día tras día, esa carga inevitable
tan agobiadoras en toda circunstancia
donde el alma lleva a vivir distinto
al cuerpo y la sombra fiel.
Pero un día, el cuerpo…
el cuerpo abandona todo
dejando la sombra perdida
y el alma, sin nada
nada de nada…
………………………………………...
De noche, entre las sombras mas oscuras
la Sombra abandonada
añora los días de sol
ese cuerpo protector
con el Alma
que la saludaba abriendo los brazos
mientras ella se estiraba al infinito
en cálidos atardeceres.
En esa noche sin luna
la Sombra encontró
al alma solitaria
lamentando su abandono.
Los brillos de las estrellas
y algún guiño fugaz del cielo
cobijaron ese encuentro de amor
entre el Alma y la Sombra.
Pero llegó el amanecer
y la Sombra no tenía brazos
para abrazar.
Ni pudo saludar al alma
que se perdía por la pared
deslumbrado por el sol.
Al poco tiempo
llegaron dos hombres
y sus sombras
que cargaron la caja en un carro
junto a la que ahora es su sombra.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de junio de 2016 a las 10:32
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 115
Comentarios1
Desdoblamiento del ser, cuerpo y alma pero una misma sombra, si bien parecen dos distintos.
Un surrealismo genial Esteban.
Saludos y buenas noches.
Hay muchas historias paralelas (como en la misma vida), puede que sea una historia de lealtades y pertenencias, donde el cuerpo representa la razón o conveniencia que brinda pertenencia, el alma es el marco trascendente y la sombra resulta en la proyección física de la unidad.
Sin dudas una enunciación fria de lo que en realidad somos en el escenario que transitamos.
Pero una característica, en nuestra carrera por ser Dios, hace que demos conciencia y cosciencia, a entes como el alma y la sombra, con la posibilidad de que personifiquen una historia de amor, traición y fracaso.
Parece que está saliendo el sol (ya amaneció), deberé traspasar las paredes, huyendo del sol y esas definidas y cambiantes sombras, oportunistas.
Podés creer, que tras el encuentro, con las primeras luces, la veo cuadrada sin brazos que abrazar...
Yo te saludo, buen día y mejor anochecer.
Esteban
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