A decir verdad llueve,
celebran las aves el calor de sus nidos,
y los lirios del campo se mecen como niños
seducen los versos las calles de tierra,
y el olor a tortas fritas atraviesa
el talón de Aquiles
y me rindo a los renglones desnudos
y escribo:
la lluvia danza en la piel desnuda de los siglos.
A decir verdad llueve
en el árbol despojado que destierro del tiempo
inocencias mutiladas,
palabras afiladas de verdades incorruptas,
Realidad tergiversada en mil pantallas,
la mentira de turno,
Mediática,
persuasiva,
mece analfabetos en sus brazos de espinas.
A decir verdad llueve
Y veo en las mamparas resurgir a Dionisos,
Confundir a los pueblos
destronar la justicia
reinar en el hambre del logos
irracional,
abominable,
feroz,
impiadoso robándonos el fuego.
A decir verdad llueve
hoy celebro las aves,
el calor de sus nidos,
los lirios del campo meciéndose como niños
caminar con mis versos las calles de tierra
recuperar la risa bajo la lluvia inmensa,
y qué importa que me moje,
Si atraviesan renglones desnudos del tiempo
un olor a torta frita
la carbonilla y el barro
y esta sangre mestiza fluyendo entre mis venas
recuperando el fuego
en los silencios de esta mañana sin nombre,
de este amanecer de nuevo
de este empezar de nuevo
en el origen del nombre que habito y que me habita.
A decir verdad, llueve.
Darío Valenzuela
Del libro: Claudia-Desde lo profundo de tus ojos-
- Autor: DAR47 ( Offline)
- Publicado: 3 de junio de 2016 a las 06:21
- Categoría: Amor
- Lecturas: 53
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