Puliendo piedras...
Han pasado los tiempos
recorriendo laberintos,
abriendo puertas,
cultivando el alma,
puliendo piedras y guijarros,
ayudando a otros
como en las vividas mingas *
de mi querida tierra allá en el nido.
Sintiéndome lluvia de gotas vivas,
aportando consejos como humedad
de nube pasajera,
recorriendo rincones de un mundo ajeno
- lejano del mío...
Adoptado para vivirlo
y adaptado para domarlo
y por fín...
vaciar mis vaguadas de maestro
en muchos niños, jóvenes y también viejos
que quisieron compartir la vida
escuchando y aportando consejos,
repartiendo el pan que había amasado
- junto al tiempo...
Muchas veces fue pan duro
y otras tantas,
solo migas y un sorbo de agua
de la clara...
Eso no importaba porque eran propias,
podía ofrecerlas al que en soledad
necesitaba compañía y una palabra...
durante muchos años
yo quise compartirlas
y así lo hice
aunque fueran nada
o simplemente pocas...
* "mingas" - reunión de gente que voluntariamente ayuda simplemente por colaborar con su trabajo.
-
Autor:
Purenino (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 3 de junio de 2016 a las 14:09
- Comentario del autor sobre el poema: Una mirada llena de satisfacción a mis largos años de profesor.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 21
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok.
Offline)
Comentarios5
Hermoso escrito, que para mi es la reflexion de como se pule la vida, el despertar de cada mañana, es lindo leer algo tan inspirador. Gusto leerte
Hermoso buena labor.
Saludos
Excelente poema Luis. Me has recordado lo de: cuando muera pesarán muy poco mis alforjas; las tuyas amigo, además irán llenas de bonanza. Un abrazo
letras que nos invitan a meditar en el sentido de la vida, la satisfacción de haber contribuido en la formacion de tantos seres que hoy serán grandes profesionales por el granito de arena aportado,
ha sido un gusto pasar por tus letras
saludos desde colombia
Que bello, el trabajo de maestro es muy gratificante al alma.
Tanto se puede hacer con tan poco.
Tanto necesitan los niños de una palabra de aliento o cariño, como de un te calentito en los dias frìos.
Espectaculares versos poeta, que me recordaron mis dècadas de trabajo junto a ellos.
Un honor leerte.
Saludos, maestro.
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