Confidencias entre amigos

¿Sabes?, como tu, también soy profeta del silencio.

A veces me encierro, pongo mis defensas frente al mundo; pero al igual que tu cuando arriba la noche, camino un poco por el espacio que siento mío, al que he declaradoINTIMIDAD, muevo mis extremidades internas; las fibras mas sensibles de mi ser.

Limpio mis alas del polvo del día he intento volar.

Ayer, que te descubrí ;, pasaste de la incógnita a formar parte de mi orquesta, la que da cadencia y sentido a mi vida ,eres nota suave.

Tal   vez  podemos  ser amigos,   guardare todos tus secretos   y   tú    los   míos……

Ambos nos tendremos confianza, y aunque a veces aparentemos no llorar, entre nosotros seremos capaces de reconocer la verdad, y de igual manera, entre nosotros quitaremos amarguras; tu en forma de rocío y yo en pequeñas gotas, lloraremos juntos y ambos la pasaremos mejor.

El frio y la soledad no nos derrotaran,      venceremos al miedo de compartir con otro nuestro yo, la decepción y el temor al engaño; a involucrarte. ¡no!, el uno vera en el otro la redención de la ilusión.

Es difícil sobrevivir en nuestro mundo de piedra ,¿no crees?, ambos buscaremos un ser de nuestra misma “especie”. ¿Sabes?   tal vez ella y el estén viendo hacia el infinito del pensamiento,    igual que  tu y yo

Y las confesiones entre amigos se han convertido en declaración de sentimientos.

¿Sabes?, como tu, soy un profeta del silencio………

Ayer, que te descubrí, mientras los ojos de mi espalda lloraban al ver como, quería tu presencia fugarse del momento; te descubrí cerca.

¿Sabes?, ambos tenemos un diamante dentro de nosotros , y, a veces brilla dentro de de nosotros sin necesidad de desnudarse, tu luz profunda y calor inmenso me atraviesan provocando en ese momento el reconocimiento de tu alma con mi alma.

Ayer que te descubrí; te descubrí cerca, muy cerca

todos tenían con quien platicar todos se movían…….. tan solo tú y yo, prestos a explotar, guardábamos nuestros silencios, buscando, esperando el uno en el otro, a ese tú que también anhelaba explotar en silencio.

Ayer te descubrí; te descubrí cerca, muy cerca, tan cerca de mí. ¡claro!, era necesario estar despierto y con los ojos realmente abiertos, para percibir tu gran vida y tus profundos sentimientos

Angel R. Cerón