"El jardín de la neurología brinda emociones artísticas incomparables y se disfrutan experimentando los misterios del sistema nervioso".
Uno de Octubre 1950
Escribo y no deseo que mis párrafos sean respondidos. tengo la certeza que todo camina por si solo en ese lugar, la morada del hombre bueno no es el martirio de los hombres libres.
Aquí todo marcha bien, la vida se hace ligera cada vez mas, el invierno y el universo han devuelto gracia y sonrisa. Estoy muy contento estos días aunque no vendrás, en ocasiones dibujo y escribo con tus manos pero ayer pude ver con tus ojos. Nuestros pasos siguen teniendo sentido y destino. El agua sigue siendo un privilegio mas para el negocio del burgues y los ríos ya no fluyen. Nos ha ganado el silencio.
Me enseñaste que los que hicieron derramar la sangre del pueblo Indígena en Izalco en 1932 siguen libres, fue un Etnocidio feroz. Los que perdieron a Roque en Mayo de 1975, siguen Libres lo sabemos Dalton renace en cada letra. Los estudiantes del 30 de julio del 75 no están perdidos siguen desaparecidos. Los que mezclaron la sangre del animal con la de los hombres, mujeres, ancianos y niños en las aldeas del Mozote, La Joya y Los Toriles, en el norte de Morazán en 1981 siguen libres. Las Urnas con el césped y la sangre de los Mártires Jesuitas aun continuan húmedas. Existe el perdon, enseñaron la teología de la Liberacióncon, actos que entre otros los condenaron a la muerte, se entregaron a nuestro pueblo, eran conscientes que ni con todo el oro robado al mundo nunca nada seria equivalente a la riqueza cultural aniquilada por la corona Española a nuestros pueblos originarios.
Estoy muy contento estos días aunque ya no vendrás. Aquí no habita la justicia y seguimos sin conocer la Igualdad. Óscar Arnulfo Romero y Galdámez hombre de Dios que camina y vive con los pobres Nacio en 1917 - ∞ dijo: “Tampoco conocemos de qué manera se transformará el universo pero Dios nos enseña que nos prepara una nueva morada y una nueva tierra donde habita la Justicia”. San Salvador, 24 de Marzo de 1980, a las 17'00 horas, en la Capilla del Hospital de la Divina Providencia. Solo la consciencia de nuestros puebos abrirá la puerta de la Paz y la verdad, ningún hombre frio será libre y ningún hombre libre habrá muerto, sanara la herida de la historia inconsciente, ningún niño y anciano en el campo tendrá sed. Los Ríos seguirán su destino, el agua no será más un privilegio sino un Derecho Humano y lo que no fluirá más serán los ríos de angustia, confrontación y homicidios de hermanos contra hermanos en nuestros pueblos.
Hasta pronto, todo sigue igual y aunque nuestro destino se separó ya hace algún tiempo seguimos caminando juntos, puedo verte en el rio, el árbol o sus hojas, el viento y el mar, en la lluvia en la montaña, estas ahí en lo ilusorio y lo tangible cada día te ofrendo mis ojos para que por medio de ellos podas contemplar el paisaje por la noche o por la mañana. Todas las personas en las que te multiplicaste ese dia tienen la certeza que esta tierra no es nuestra y por lo tanto confiamos en Dios que la sabgre de tus venas a regresado al mar y el polvo de tus huesos al suelo, nada nos pertenece nosotros le pertenecemos a la tierra. Relajate, respira y lee, te veré en unos años...
Te extrañamos.
- Autor: Ivan Pablo ( Offline)
- Publicado: 17 de junio de 2016 a las 20:00
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 59
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni
Comentarios1
Un buen relato-carta, o epístola, que deja sabor a tristeza
Saludos amigo
Nélida
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