A veces cuento las horas que miden los largos días,
como si al contarlas podría apresurar mi existencia,
no es que quiera yo con eso que termine mi experiencia,
estoy feliz de vivir y lo hago con vehemencia.
Vivo con regocijo aun en los días malos,
esos crueles días oscuros de tristeza y desengaño,
he aprendido a coexistir entre lo bueno y lo malo,
es que el camino esta lleno de lágrimas y cruel agravio.
Mas no dejare por eso que se apague mi alegría,
mi antorcha estará prendida mientras dure aquí mi vida,
le ruego al Padre me otorgue una larga y grata vida,
para contar a la gente de su amor y su venida.
Si me dedico a contar los minutos algunas veces,
la causa es que vivo ansiosa esperando que regrese,
Jesús prometió volver y se que lo cumplirá,
yo confió en su palabra porque se que es la verdad.
El Padre otorgo al hijo el derecho de juzgar,
a los que viven por el y a los que se portán mal,
por eso trato a diario de estar a cuenta y muy lista,
cuando suene la trompeta quiero estar apercibida.
No vasta solo vivir y ver pasando los años,
ignorando nuestros actos y criticando al hermano,
no seremos salvos por las obras que hemos hecho,
mas serán el contrapeso en la balanza de Dios.
Este mundo no ofrece nada que valga el cielo,
lo que mas nos gusta aquí al final es perdición,
la bebida es adicción y repugnante es el ebrio,
el cigarrillo apesta y de problemas esta lleno.
Quienes son adictos al sexo dolores han de tener,
y los que usan drogas hasta nombrarlos es perder,
si en el trabajo te afanas tu cuerpo destruirás
y el día en que te mueras otro lo disfrutara.
Entonces medita en esto, que vale la pena aquí?
si por mucho que te afanes nada podrás llevar,
al final de la cosecha que es lo vas a encontrar?
vida eterna o perdición es lo único a ganar.
Mejor es estar a cuentas con el dueño de la mies,
y los frutos de su viña recojamos con placer,
el principio de siembra y cosecha seguro no fallara,
lo que hallamos sembrado eso vamos a cosechar.
Sembremos con prontitud pues pronto la noche viene,
y los que no estén listos se quedaran en sus redes,
no sigas perdiendo el tiempo, cuéntalo como yo,
presta atención al cielo pronto viene el gran Señor.
Salmos 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días,
Que traigamos al corazón sabiduría.
- Autor: Emma Lores Matos ( Offline)
- Publicado: 26 de junio de 2016 a las 10:57
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 113
- Usuarios favoritos de este poema: yito, grabra
Comentarios1
No creo mucho en la existencia de Dios, pero su poema realmente esta muy bien hecho. La felicito
Gracias por su felicitación aunque no busco grandeza sino ensalzar a ese en el cual usted no cree mucho, aunque que crea un poquito ya es mas que nada, aunque no basta pero es un peldaño hacia arriba. Gracias por su visita y que Dios lo ilumine.
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