( Una de tantas nostalgias de Boris Gold )
Después de dar tantas vueltas
entre mareado y cansado,
abrazado a tantos chicos
la consigna es divertir,
el caballito tan dulce
con alma de calesita,
toma tan solo un descanso
en un sueño...de aserrín.
Su casita es un terreno
en un barrio suburbano,
la suerte de su relincho
está atada a la ilusión,
de un montón de risas puras
y una infancia agradecida,
es parte del inventario
y sortija...de emoción.
El carrusell tiene un dueño
que camina despacito,
pues los años ya le pesan
de tanto y tanto girar,
hicieron que pareciera
el enano de algún cuento,
su barba blanca es de nieve
y sus ojos...verde mar.
Vive inmerso en las historias
de un montón de cosas lindas,
con bullicios infantiles
que con ganas vio pasar,
se dio cuenta que era hora
de tomar la calle larga,
y con duendes y payasos
un vals triste...bailará.
Él lo tiene muy presente
que se acerca ya el momento,
en que un DIOS calesitero
a su lado llamará,
vendrá el barrio acongojado
a rendirle su homenaje,
y en un avioncito rojo
hasta el cielo...volará.
Boris Gold
(simplemente…un poeta)
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Autor:
boris gold (
Offline) - Publicado: 29 de junio de 2016 a las 10:12
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 22
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni, rosamaritza, Blancanieves, Lita_81, Maria Hodunok.
Offline)
Comentarios4
Cada vez me sorprendes con tu hermoso sentir, esta vez en tu poema es tierno y lleno de muchas nostalgias, abrazo mi querido boris.
cariños rosamary
Precioso poema, estimado poeta, remembranzas bellos sueños que se resgiardsnnen lo mas profundo de nuestra alam que en su belleza ud. Ha descrito con tal grandeza y en versos emnoblece. Bendiciones
No hay palabras para comentarte Boris...sos ùnico, tus nostalgias son las de todos nosotros.
Abrazos, poeta.
Un hermoso poema de encanto Boris.
Un abrazo amigo,
David
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