Soy madera resistiendo escombros de olvidos
llanto de una misma ausencia
rama desmembrada que se alza sobre la razón doliente
una plegaria fundada en el hambre para alcanzar el cielo,
la llaga y las hojas brotando en la esperanza
una sombra en las villas desnudas de memoria.
Soy savia recorriendo la profunda saciedad de un beso
alzándose para donar alas en un verso
el mudo palpitar de la Pachamama
la huella desahuciada del hombre que se inclina a rezar
sin tiempo su pobreza infinita del otro en las veredas de este otoño.
Soy quien se desviste ante las palabras para colgar mi nada
en la riqueza de los árboles,
una palabra en el despertar de mis letargos
la insatisfacción que se sacia bajo la sombra de una mora de infancia
la poesía adolescente corriendo sin medida por las venas
hasta hacerse savia y derramarse en lágrimas
para seguir naciendo entre las hojas.
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Autor:
DAR47 (
Offline) - Publicado: 3 de julio de 2016 a las 08:43
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 18
Offline)
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