No son de rosa, miel y nota
Son de hongo, ajenjo y latido
Nacidos del no-nacer,
sus llantos despedazan
la frontera con el mundo.
Rompen los gritos
que los señalan y obligan,
en añicos de dolor invertido.
Son como alimento de polilla
que marcan su presencia
con la huella que deja el agujero.
A veces, también crecen.
Como buenos vástagos del deseo más puro
polimorfos en apariencia
persiguen no obstante una causa común:
perpetuar su guerra con el horror del mundo.
En una huelga eterna que busca
descubrir el germen de la balanza quebrada
donde se gesta la tiranía de la vida.
Siendo por ello todo menos eso: versos.
- Autor: Rosanna Moreda (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de julio de 2016 a las 11:26
- Comentario del autor sobre el poema: Publicado previamente en mi blog en julio del 2013. Puede decirse que de alguna manera soy activista de la no maternidad por opción. Curioso que levantes una piedra y salte el vecino, (vecino en singular pero que representa un enorme plural), que te pregunte: ¿Cómo es que no tienes criaturas todavía, mujer? Se te va a pasar el arroz... Pero el mismo procedimiento a la inversa, es decir, si yo a ese mismo vecino le soltara un: ¿Cómo es que has tenido criaturas? Te quedó crudo el arroz; el fulano no me hablaría más. Es lo que tiene integrar el amplio colectivo de lo marginal, donde fuimos a parar también las nulíparas. Más bien, donde nos largaron. Y que conste que me encantan las criaturas tanto animales como humanas.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 79
- Usuarios favoritos de este poema: Dante Cruz Velez
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