AMOR UNIVERSAL.-

Cuando me vaya de acá, que pronto será…

Quisiera dejar las huellas de mis querencias

en  un lugar seguro, para poder seguirlas  a mi

regreso...en ese día en que volveré a buscarte.

Todos los recuerdos se irán conmigo, no dejo

 ninguno suelto a su suerte, porque los  cargo

muy cerca de mi pecho, guardados en su cofre

natural, que es mi corazón…

No quiero que se esparzan mis memorias,

mis tristezas, mis alegrías y todas las esperanzas

que en mi alma forjé, a causa de ese amor tan tuyo

y tan mío. tan nuestro...

Siempre he escuchado las palabras de los sabios y

los he oído decir que cuando se ha amado como yo

lo he hecho contigo, todo ese amor estará esperando

por ti, cuando regreses de tu viaje a puertas abiertas.

Te marchas y dejas incompleta una parte de ti y del otro.

Por eso, nada muere, hasta que logra reintegrarse en

un solo Ser.. todo vuelve a su origen y es la Ley divina.

El amor es eterno y, aunque ceses de vivir, tu amor vivirá.

Tu amor será esencia universal indestructible.

Mi amor por ti ha superado muchas vidas, ha estado allí,

en las eras y, cuando él se asoma logro reconocerlo, a pesar

de las lejanías y las soledades de nuestros desarraigados

corazones de amantes en rebeldía y en confusión…

!Así de firme es el amor que se hace sujeto de las eternidades!

Hemos regresado para estar tan lejos y tan cerca y nunca

juntos, porque creemos que la vida nos tocará por siempre.

Vana ilusión la nuestra, porque ya la muerte y la vida nos han

tocado la puerta varias veces y, aún, no aprendimos la lección.

¿Sabes algo, amor mío, de la vida y de la muerte?

 La muerte no existe y será inevitable que nos veamos

de otra vez y de nuevo... hasta que aprendamos

lo que vinimos a aprender…

Nadie escapa de su destino ileso y tú y yo estamos

presos en la rueda eterna del Samsara,

la rueda cabalística de la vida y la muerte.

Tu esencia humana y la mía, son la misma esencia, por ahora.

No pienses en dos corazones, en dos almas, sí sólo somos dos cuerpos.

Encerrados estamos en una sola chispa divina que inunda

 nuestra naturaleza de SER,  la tuya y la mía.

Estamos destinados a la unicidad para llegar a la completitud…

¡Superar el sentimiento de dualidad y  egoísmo, es necesario,

para completar el ciclo del renacer eterno!

-ALMA, CUERPO Y DESTINO: ESO SOMOS-

!Recordar que todos somos UNO, es menester,

para alcanzar la eternidad! 

Raiza N. Jiménez/