De tu esencia, Señor, confluyen puras
aguas vivas de océanos de amor,
las que sanan tristezas y dolor,
las que pueden calmar las desventuras.
Si me cubres con ellas van seguras
mis acciones y ya no habrá temor,
sumergiéndome en cada resplandor
de tus rayos, caricias tan seguras.
Del hombre borras toda su maldad.
No se puede escapar de tu sapiencia,
en tus manos habita la verdad.
A tu lado no existe la dolencia,
la injusticia, el dolor, la soledad.
Océanos de amor en tu presencia.
- Autor: "Gaviota" Romero (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 31 de julio de 2016 a las 13:51
- Comentario del autor sobre el poema: Dios Jehová, nos preparó un lugar maravilloso donde vivir. Pero además nos creó a su imagen y semejanza. Esto significa que somos capaces de sentir su amor y de expresarle el nuestro, y eso nos hace felices, tal como hace feliz a un niño sentir el cariño de sus padres. Además, Jesús dijo: “Felices son los que tienen conciencia de su necesidad espiritual”, y esa necesidad se satisface cuando nos sentimos cerca de nuestro Padre celestial (Mat. 5:3). Como vemos, Jehová nos ama y lo demuestra dándonos “todas las cosas [...] para que disfrutemos de ellas”; tanto las cosas físicas como las espirituales
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 161
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni, Mauro Enrique Lopez Z.
Comentarios1
Saludos espirituales Gaviota, feliz tarde, con respecto al poema y tu voz, felicidades ,comulgo con los versos, me encanta como proclamas
Abrazo fraterno
Nélida
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