Soy como la lluvia en el desierto,
Tan fugas y efímero.
Las hojas bailan
Con el cantar del viento.
Danzan sin cuidado
Hasta perderse con el tiempo.
Tengo gravado en mi memoria
Tus ojos al brillar,
Tengo en mi alma
Tu voz virginal.
Estamos ahora sobre
Los confines del universo.
Gira la vida
Pero la detienes,
La detienes con un beso.
Amor de mi alma,
No nos unió el destino,
No fue el cielo ni los deseos,
Quizás fue Dios,
Quizás un suspiro.
Soy como el agua
Qué existe en este lago,
Tan tranquilo y quieto,
Pero tan vivo y preocupado,
A la espera de que te inundes
De mi ser, que nuestros
Cuerpos sean uno.
Tengo en mis corrientes
Tus mejillas sonrosadas,
Tengo en mis olas
Tus pestañas rizadas.
Fuimos desconocidos
A los ojos de nuestros padres,
Fuimos mucho tiempo hijos,
Ahora nos toca ser amantes.
Soy el verde de los árboles,
Tan distinto y colorido,
Tu sonrisa parece soles
Y mis raíces te han absorbido.
Tengo en mis cortezas,
El tacto de tu piel,
Tengo en mis semillas
El ritmo de tus pies.
Formamos parte de este instante,
De los árboles
Y el agua,
De las risas
Y nuestras almas.
No controlo el destino,
Algún día me puedo secar.
El viento tiene su propio rumbo
Y mis hojas se pueden marchitar.
Si algún día nos llegamos a separar
Y no quieras volver a verme,
Vendré a este lugar,
Donde las horas no duermen,
Y tu recuerdo jamás morirá.
- Autor: Victor Gedig (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de agosto de 2016 a las 00:35
- Comentario del autor sobre el poema: Poema dedicado a mi lugar favorito: La Laguna de San Carlos.
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 59
- Usuarios favoritos de este poema: Kalianali
Comentarios1
Me encantó muy bueno Saludos
Muchas Gracias.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.