En el ultimo momento que respire
cuando apague mi garganta sus palabras,
quiero hacerlo en los brazos del que vive
y concede salvación para las almas.
Sin miedo y sin dolor quiero entrar
en el sueño que descansan los humanos,
al poner mis memorias en el olvido,
que sea agarrada de tu mano.
Ese día que nunca he anhelado
pues la muerte no es algo deseado,
espero que tus ángeles me guíen
por el valle do camine hacia el descanso.
De los míos rodeada quiero estar
decirles hasta luego sonriente,
con el gozo de haberlos amado bien
y tenerlos junto a mi cuando regreses.
Esas horas que se dicen son muy negras
te ruego para mi no sean de miedo,
pues se que al despertar sera el día
que me lleves contigo hacia el cielo.
Dame paz en ese instante culminante,
abrázame a través de mis amados,
la esperanza eterna de tu gracia
sea mi ultimo pensamiento apresurado.
Despertar el día de tu venida
con un cuerpo incorruptible es mi esperanza,
reunirme contigo en las nubes
y que nadie falte de mi casa.
Gracias Señor por esta fe
que sostiene aun hasta en la muerte,
por la vida que me has dado en tus caminos
y la dicha mi Dios de conocerte.
Que pueda mientras este en este mundo
compartir con otros de tu amor,
a través de los dones que me has dado
usados para tu gloria y honor.
Que el tiempo que me des lo aproveche,
que nada me distraiga con su afán,
gracias por haberme rescatado
y la promesa de llevarme a tu hogar.
- Autor: Emma Lores Matos ( Offline)
- Publicado: 29 de agosto de 2016 a las 23:42
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 84
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