Carta de una guerrera

La única vez que luche en una guerra
fue la última vez que lo hacía,
a pesar del triunfo me quedaron demasiadas
cicatrices y esas ganas de pelear una guerra
murieron con la persona que fui.

No recuerdo como fue la guerra solo recuerdo dolor,
lágrimas y un par malas palabras que
soltó tu boca en mi contra, además de tu juramentó
de que nunca mirarías atrás y que nunca más me mirarías a mí.

Y ahí estas ahora mirándome
como si el tiempo no fuera a cobrarte
lo que me hiciste como si mis cenizas
no me hubieran renovado a mí
a la que luchaba, a la que yació fuerte
y ahora se cae en pedazos con un roce,
sí murió la guerrera y quedo la mujer
en este tiempo muerto.

Donde tú disfrutabas destrozando y yo luchando,
ahora, me miras a mí a tu pasado maldito,
y aquí estoy yo dejando de pelear guerras
ya no puedo, se me olvido la guerra,
con aquel dolor que rompió mi corazón,
mientras finjo que te estoy dejando ir.

AUTOR. Fernanda Aracely Moreno