Te abrasé en la lluvia,
Eran millones de gotas
Tomando nuestros cuerpos,
Mojando nuestra alma,
Recorriendo cada recoveco,
Estremeciendo nuestros sentimientos.
Te besé en la lluvia,
Mi saliva tomo algunas gotas,
Eran frías hacían oscilar tus pupilas,
Te sentía viva temblando de felicidad
En ese beso largo tan mojado,
Fuimos uno en ese inmenso charco.
Te quise en la lluvia,
Aún te quiero todavía,
Fue un querer empapado aquel día,
Nuestras ropas pesadas,
Nos cautivaban aun más de lo normal,
Se soltaban “te quieros” de tu boca,
Me hacía titiritar más que la lluvia.
Te miré en la lluvia,
Que bella mi mujer
Tan elegante e informal,
Disfrutando de aquel llover,
Como un hermoso animal.
Te miré ahí mojándote,
Me acerque para compartir
Cada gota de agua ligados,
Sin más abrigo que nuestros brazos.
Te amé en la lluvia.
Tu mi musa,
Tan casta y pura,
Alejando el mal,
Acercando el bien,
Disfrute de tu acariciar,
Cada beso que rozo mi piel
Me hizo caer como la llovizna,
Hasta morir en tu cintura,
Resucitando en el triangulo de las bermudas
Que tienes guardado entre tus piernas.
Cada caricia mía te conmovía,
Te elevaba a otra vida,
Y aunque el agua caía fría
Nuestra temperatura crecía,
Sin pensar en la fresca lluvia,
Que sin más era cómplice,
Del acto de amor húmedo,
Que nos llenaba de placer.
Te hice mía en la lluvia,
Fui tuyo en la lluvia,
Sin frío, ni miedo,
Fuimos tres en el sexo.
Tu, la lluvia y yo.
Te escuche en la lluvia,
Dijiste te amo por vez primera,
Te respondí con un grito,
que calmo el diluvio,
Tus ojos brillaron
Llenos de ilusión,
Me inundaron mi corazón.
Y con la lluvia de testigo,
Te declaro mi amor.
Que quiere ser correspondido,
En la infinita lluvia
Y los infinitos besos,
Que podemos darnos,
Por cualquier motivo
Sin nunca alejarnos.
- Autor: ErC ( Offline)
- Publicado: 6 de septiembre de 2016 a las 00:17
- Categoría: Amor
- Lecturas: 111
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni
Comentarios2
Hermoso poema. Esa bella entrega con el permiso suyo no fue lluvia era un huracán de amor.
Saciedad merecida para ser siempre consumada.
Mucha swnsualidad. Ma habéis gustado
Abrazos
Hermoso poema. Esa bella entrega con el permiso suyo no fue lluvia era un huracán de amor.
Saciedad merecida para ser siempre consumada.
Mucha swnsualidad. Me habéis gustado
Abrazos
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.