Ahora parece muerta
como un témpano violeta
y mustia como un jazmin del invierno.
Les doy de beber palabras de amor a sus oidos frios.
Estan ciegos sus ojos
y su piel de porcelana
es como la de las bellas soberanas.
...está muerta...está casi muerta...
...pero la voy sintiendo casi viva...
Le doy mi aliento para que respire...
Mis oraciones le ofrezco aunque no soy creyente...
Y la sangre de mis venas la cambio por su beso...
Y entrego mis ojos para que los suyos vuelvan a mirar.
El milagro me sonrie
ya esta viva su alegría
y ya anhelo la caricia
atrevida y presurosa de sus manos de jazmín.
Su piel palpita brillante
como una patena de oro fino y de marfil.
Gira como un astro de amor en el cielo
el brillo de la esperanza terca y del milagro.
En el aire viaja la paloma de sus besos...
y se abren sus labios en palabras de abejas y de flor.
Soñé haberla visto inundada de muerte
con crisantemos y violetas.
¿quien sabe de la vida y de la muerte?
¿quien entiende de la magia y del amor?.
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- Autor: juan maria (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 7 de septiembre de 2016 a las 00:04
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 50
- Usuarios favoritos de este poema: Walberto Díaz, un poeta lirico
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