A solas con mi pensamiento me conmuevo al concebir
que los dioses me sitúan aquí por que es el sitio que
me pertenece.
Dispenso todas las energías que me impulsan a enfrentarme
a los minotauros que encierro dentro de los laberintos de mi
inconsciente, que se alimentan hasta la nausea de las ausencias
e insuficiencias que campean por sus respetos desde mi más
tierna infancia.
Deseo llegar al dios que guardo en mis entrañas a través del
necesario silencio, silencio que llene hasta fundir todos los
poros de mi alma para que se obre el milagro místico, el encuentro
conmigo mismo, encuentro que aclare mi destino, que desvele todas
las claves que sellan las puertas mi claustro inédito.
Estoy en un camino equivocado, sin salida, sin árboles a la vista que
me certifiquen mi proximidad a la Naturaleza, a mi naturaleza
primigenia que me alienta a unirme a los míos, a mis congéneres que
me sirven de espejo a mis esencias, a la cifra de aquello en lo que me
voy convirtiendo.
- Autor: Albertín (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de septiembre de 2016 a las 19:27
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 33
- Usuarios favoritos de este poema: Hasher, kavanarudén
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