Tengo hambre mi cuerpo se hambre
A las aventuras que inclinan amarte
Fruta prohibida ciencia maldita
Que me castiga con toda su ira
Inicuos sacerdotes farsantes papistas
Que inclinan su odio al mal y la ira
Con su nefasta sensación
Sentencian al justo Para hacerse poseedor
De riquezas injustas al gran tentador
Y ríen en ciencia para dañar lo bueno
Y dirán de tal escoria se habla lo bueno
Comentarios1
La religión destruyendo a Dios, para variar, muy bueno tu poema. 😣
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