Dónde están ahora tus acordes.
Los más dulces,
Mejores susurros de amor.
No arrullas con tu voz
Como en el preámbulo
Ni produces lo extático sensual.
Mordaces e hirientes increpaciones
Hacen centrípetas en mi cerebro.
No delíneas ni esculpes mi cuerpo,
Tus “herramientas” solo lastiman, repujan.
La alteridad de mi vida
Rumia la nubilidad
De la inocencia quiescente de crisálida.
Soy mariposa de truncado vuelo
En cielo de felicidad perdida…
Derechos reservados
- Autor: Monlier (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 28 de septiembre de 2016 a las 20:03
- Comentario del autor sobre el poema: A las mujeres, ni con el pétalo de una rosa, reza el dicho. No es hombre quien agrede verbal o físicamente al sexo opuesto. El solo pensar haber salido de las entrañas de ese ser ya es motivo de respeto, idolatría y consideración para el sexo débil. ¡Tú, mujer!, denuncia la agresión de quien te agreda no solo físicamente sino verbal y moralmente. Conoce tus derechos de fémina, la ley Contra la violencia de género.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 26
- Usuarios favoritos de este poema: Luna y Poesía
Comentarios2
Un poesía que toca hondamente mi.alma...pues lo viví en carne propia. Hoy graciass a Dios forma parte del pasado.
Me auno a tu llamado de denunciar...
Un gran saludo!!
Hola Luna, por ahora te llamo así pues ese seudónimo va con mi poema, que te ha gustado ya que ese satélite "alumbra" vida como ustedes. Por otra parte me alegra que hayas resurgido de las cenizas como el Ave Fenix con tu autoestima elevada luego de esa mala experiencia. Gracias por tu comentario y por identificarte con mi escrito. Saludos.
Me ha gustado tu lenguaje, tu vehículo y tu capacidad metafórica.
Saludos mi estimado Alberto Escobar. Gracias por tu lectura y por tu comentario.
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