Al jardín de mi vivir,
llegaron fugaces mariposas
y en su raudo vuelo
me dejaron caer gotas de lluvia
y semillas de esperanzas al pasar,
que se incrustaron,
en el valle de mi alma
y pudieron germinar.
Luego llegó el viento,
y me trajo entre sus alas
un bondadoso ramo
de matizadas ilusiones
que quedaron prendadas en mi ser,
transfigurando milagrosamente
mi alma, un poco marchitada
que vivía en el hastío.
Comentarios4
Sentimientos a granel en tu poema..
Muy bueno recibe mis elogios!!..
A ti…
Ten mi afecto fraterno..
KALITA.
Kalita, gracias por tu comentario muy amable y por tus afectos que me ofreces gacias tambén. Un fuerte abrazo, Lidia.
Que lindo poema mi querida Lidia, la esperanza siempre acompaña a la vida, los ilusiones y sueños parte importante que tengas para que pronto se conviertan en realidad...
Felicitaciones...
Un beso.
Elo, gracias por lo que dices a mi humilde escrito, porque escribo la inspiración que me llega, no porque soy poeta. Gracias de nuevo y un fuerte abrazo, Lidia.
Una dulzura de poema que disipan esa "nubegris", un poema lleno de encanto, para leerlo y releerlo.
Bellísimo
Muchos besos
UN ENCANTADOR POEMA QUE NOS EMBRIAGA DE DULZURA, MIS FELICITACIONES Y ABRACITOS.
Querida Felina tu siempre muy amable en tus comentarios. Gracias por haberte gustado lo que escribí. Un fuerte abrazo, Lidia.
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