De repente haces click y te das cuenta
que no podes controlar nada,
ni un momento, ni una situación,
ni el rumbo de tu vida, ni tus sentimientos,
ni tus pensamientos, ni el de los demás.
Entonces... qué queda?
La libertad de seguir, de amar, de sentir,
la libertad de vivir nada más que el presente,
el resto no existe...
Y justo en ese momento llega la felicidad plena.
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Autor:
Rubens (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 9 de octubre de 2016 a las 01:24
- Comentario del autor sobre el poema: Ana es mi 2da. hija de las tres que Dios me ha regalado. Ella es la autora de este bello poema que encontré en su Facebook y me tomé el atrevimiento de publicarlo entre los míos pero no voy a robarle su autoría. Me encantó y quiero compartirlo con udes. mis amigas/os amantes de la poesía. Espero les guste.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 2058
- Usuarios favoritos de este poema: Elmer Godoy
Offline)
Comentarios3
Ciertamente, por lo general somos nosotros mismos los que construimos nuestras prisiones.
Felicitaciones a su hija, muy buena reflexión.
Saludito.
Ross
Pocas veces nos detemos a pensar en que la vida es un soplo. Me pareció tan real lo que escribió mi hija y me hizo tomar conciencia que el pasado no existe pq ya pasó, el futuro aún no ha llegado y que sólo tenemos el presente. Mañana puede no llegar. Algún día... Tarde o temprano sucederá.
Tomaste una buena decisión al publicarlo. Felicidades a tu hija y obvio también a ti. LINDAS reflexiones de vida.
Muchas gracias Evandro. Hermosas tus creaciones literarias. Hasta siempre.
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