Divagaciones II

Santiago Miranda

 

    Dime quien habita la casa del ser

tú. palabra que contienes la locura

su dirección estelar he extraviado

conmigo en los vaivenes del discurso

del orden primario, transgredirlo es

el llamada del nuevo, hombre nuevo

 

YO soy el ser

              tú eres el mundo

ambos somos ventanas sobre el marco

cuyo eje es si mismo.

 

lo que nos pasa (por

las noches de insomnio

y mañanas de resaca) es que;

el hombre es un poema

   en - tre - cor

ta - -  -  -  -  -  do

 

Entre cielo y tierra

 espero estar

más allá de estanterías

y cubículos aprisionados

más allá de lo calculado por el programa

en las altas estructuras

o en los subterráneos atiborrados

de sueños de concreto agrietados

 

nos han impuesto

            la técnica del habla

deglutida, calculada, milímetricamente exacta

me han arrancado los ojos y desalojado las órbitas

  desde la trayectoria

          en cuyo espacio sin lugar

    los sentidos en belleza estallan

 el habla delante de mi

ello guía mi curso intuitivo, ya que

  la palabra conoce aun mas que el hablante

devuelve tu curso natural   /lo hablado, lo hablable

fuera al anclaje de fértiles prados /contra lo inefable

donde el fruto cae, muere y renace

    la razón (perdura) fuera de ella misma

no pierdas tu mamífera voz sin nombre

responde, a la imagen que se cruza

te cruza y emerge, desde ti

a las profundidades ocultas en tu reveladora 

agonía similar a una circunferencia

plagada de árboles y anillos

algo como la superficie ondulante

de una mirada atenta de ave

algo como uno par de labios planeando

sobre tu cuello, como espadas en picada
contra la oquedad del hombre moderno
contra su misería y muerte
el sinsentido. detona los orígenes
perpetuos esperando a ser d'escritos

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  • Autor: Santiago Miranda (Offline Offline)
  • Publicado: 11 de octubre de 2016 a las 23:52
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 21
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