Aprendí a amar los ríos en los mapas de la infancia,
estudiar un río, era como estudiar al hombre,
surge de las entrañas de la tierra, a veces nacía
tímido, escondido en alguna oquedad, bajo los chopos
y las adélfas y ya se oían, los balbucéos o las risas
brotando a borbotones en mitad de la ladera,
todo era alejarse de sus orillas y salir del paraíso de
la bondad, en el que no cabían malos augurios, ni
incitaciónes a la guerra ni al martirio, aquí donde los
ríos fueron caminos para soñar de los que éramos
de tierra adentro, y para invitarnos a viajar desde
sus riberas.
- Autor: argantonio ( Offline)
- Publicado: 21 de octubre de 2016 a las 14:23
- Comentario del autor sobre el poema: Ver el agua brotar del seno de la tierra, es asistir a un parto de esperanza, beber ese agua es una bendición que nos hace seres privilegiados, sin el agua, no habrá vida, la tierra sería un planeta muerto, llenos de sombras y cráteres apagados.
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 57
- Usuarios favoritos de este poema: LeAnDro silencio es salud en soledad
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