Ese dolor que nunca acaba,
esas penas que destruyen el alma,
sueños convertidos en pesadillas,
ilusiones que roban el sueño en cama.
Y así...voy por la vida,
cual errante sin parada,
con los pies descalzos,
sobre espinas afiladas,
sangrando las pisadas,
rojas huellas,
bien marcadas,
cómo duele este andar,
pero así siempre voy,
en busca de ti,
con el corazón en la mano
entegandotelo todo,
sin pedirte nada a cambio.
Ese dolor que nunca acaba,
con espinas atravezando mis pies,
hoy continúo mi camino,
sin corazón, muda y con el alma...
totalmente vacía.
Además de vacía,
también fracturada,
para enmendarla,
no existen las palabras.
Y así siempre iré...sin corazón,
muda y con algo que queda de mí,
siempre en pos de tí.
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Autor:
Nancy (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 19 de noviembre de 2016 a las 17:31
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 33
- Usuarios favoritos de este poema: racsonando, neosan
Offline)
Comentarios2
Saludo. Un hermoso poema, canto de desilusión y algo de epranza.
¡Bonitas letras!
Muchas gracias, es un placer recibir sus amables palabras.
Saludos
Un poema de desahogo y lucha, aun con el dolor, se mantiene en pie... lo que hace el amor. Gusto en leerte. Saludos.
Gracias neosan, por su bella apreciación y gracias por pasar a leer.
Un abrazo.
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