Mis ojos son tuyos,
pues tú los haces brillar.
Te confesaré, en murmullos,
que eres quien me enseñó a amar.
Mis labios te pertenecen,
pues sin ti no podrían sonreír.
No quiero que de mi te alejes,
pues vivir sin ti, no sería vivir.
No quiero a ninguna rana,
que se convierta en príncipe azul.
Sólo quiero saber que me amas
y que mi destino eres tú.
A tu lado se anulan mis sentidos,
y no puedo ni pensar.
Tanto a tu lado he vivido...
No quiero ver esto acabar.
Y al mundo quiero gritarle
que de mi corazón tú eres dueño,
y al destino he de suplicarle
que nada de esto sea un sueño.
Laia Gil
- Autor: LaiaGil ( Offline)
- Publicado: 25 de noviembre de 2016 a las 15:34
- Categoría: Amor
- Lecturas: 126
- Usuarios favoritos de este poema: RicardoUrzua
Comentarios1
Me asalta una duda me parece haber comentado anteriormente a este tipo de escritura, Pienso no será que se fué y volvió, sino fuera así escribes muy parecido, o sea serían dos poetisa de fina escritura.
No, yo soy nueva aquí...
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