Hace tiempo que estoy viviendo
recorriendo mis propios caminos
algunos llenos de sol
y otros en penumbras
que me hacen ir a tientas, como un ciego
esperando lo peor de cada paso.
Pero cuando el sol inunda mi camino
el paso se llena de pájaros
y canciones del viento en los árboles
es cuando estoy seguro de llegar
al manantial del amor
de sumergirme en la mirada de ella
detener el tiempo, del primer suspiro
y suspenderme en los espacios de la nada
perpetuando, el mismo beso desesperado.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 8 de diciembre de 2016 a las 09:53
- Categoría: Amor
- Lecturas: 101
- Usuarios favoritos de este poema: Alextheblack, anbel
Comentarios1
Ojala eso ocurriera en la penumbra también.
Lindo. Un abrazo.
Querida Anbel, la penumbra no es tal, en la mirada de la mujer amada.
Vaya mi saludo con ampuloso movimiento de brazo (con sombrero en mano), adelantamiento de pierna y flexión de rodilla, como merece una dama.
Esteban
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.