A medida que se hacían,
más y más anormales,
tu fuerza hinchada...
hacia crecer tu valentía,
pero las viejas y dañadas células,
sobrevivían, cuando deberían morir.
Y las nuevas sin ser necesarias,
se iban creando.
En un proceso terriblemente ordenado
todo se iba descontrolando...
y en tu mente arrebolada
crecía la desazón.
Tus lagrimas de miedo,
empapaban el mar,
apagando las hogueras de los días alegres,
destilando el ópalo nocturno de tu cuerpo,
y tu tristeza se hizo una gasa azul llena de cuarzo,
un vidrio roto entre los vientos,
una estrella mojada por la luz lejana
y dormías a la sombra de tus candelas más hondas,
en el rescoldo de tu piel aterida,
con el pelo suelto en el universo
y tu pena sobre la almohada.
P.M Pedro Monroy Gemio
- Autor: Pedro Monroy Gemio (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 12 de diciembre de 2016 a las 15:34
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 76
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., Nhylath
Comentarios2
Sin palabras, poeta.
Fuerzas.!!!!!
Gracias por tus palabras son un honor
No hay palabras de consuelo que llenen el vac'io que ha dejado en tu coraz'on tu bella hija...Me ha conmovido leer tu hermoso poema, porque he sentido el dolor de la ausencia de mis seres amados!
Un fuerte abrazo lleno de bendiciones, poeta
!Nhylath
No sabes como te lo agradezco, un fuerte abrazo en nombre de mi hija que se te lo daria y en el mio propio
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.