Te tuve en mis brazos
cuando recién naciste
iluminaste mi vida
cuando dormida sonreíste
Ahora lucho por ti
con fe inquebrantable
Dios es generoso
mi dicha es abundante
Mi bella Princesa
eres mi razón de ser
en este mundo terrenal
Te he visto crecer
Nunca tengas miedo
aunque la vida sea dura
yo contigo estaré
viviendo esta aventura
No importan los retos
tú con ellos podrás
sonríe siempre triunfante
porque sola no estás
Y aunque a veces sufras
por un amor ingrato
será para tu bienestar
la fuerza que hayas logrado
Sí, vendrás a mí llorando
y yo te abrazaré muy fuerte
y sin darte cuenta
te harás más valiente
Tú vencerás el dolor
yo seré tu fuerza
y cuando te caigas mi amor
levántate con firmeza
Y una lágrima en mí
rodará al verte volar
pues muy pronto
tu nido has de formar
Y vendrán las pruebas
que te harán reina
y yo estaré feliz
por mi bella Princesa
Porque aunque mi Princesa
ya sea toda una mujer
siempre será mi bebita
la que un día vi nacer
- Autor: Arturo Emprendedor (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 13 de diciembre de 2016 a las 00:50
- Comentario del autor sobre el poema: Poema a la hija amada-
- Categoría: Familia
- Lecturas: 206
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