Tiempo al límite, pero feliz de poder compartirlo
Sentado frente al monitor, tratando de entender las injusticias de la vida, el sufrimiento de los más débiles, de los abandonados, y todo el dolor que nos rodea, siento la vibración del celular ante los mensajes interminables de no paran de llegar: la familia, los hermanos, los hijos, los pacientes, las amistades, los grupos, ahora hasta propaganda llega por este medio.
Como para relajarme un poco entro a ver lo que escriben. Respondo las preguntas de manera corta y precisa, y a veces ingreso a charlar en los grupos. Es muy tarde ya, es hora de descansar. En eso algo llama mi atención: una vieja amiga está mandando mensajes al grupo para colaborar con sus "viejitos" para esta Navidad.
Sonrío. A mi mente vuelan los detalles de una historia que, gracias a ella, pude conocer, y que me hizo creer nuevamente en nuestra humanidad. La historia de la Casa Hogar La Sagrada Familia.
Frenéticamente busco en internet. En google hay muchos lugares con ese mismo nombre, pero encuentro al fin la página adecuada. Pero para mi desazón, está inhabilitada. Sigo buscando, y al fin encuentro esto:
“A mi hijo le dio un ataque cardiaco y lo reanimaron, estuvo bien, pero le duro tres minutos, me miró, me sonrió, le dio uno fulminante y falleció. Toda mi arrogancia se desinflo en ese segundo, el hecho de tener y no tener mucho. Eso hizo que cambiara mi actitud de vida. Cuando salí del hospital me encontré dos niños de la calle, pedían asistencia médica, no los atendían, estaban muy sucios, olían mal, eran niños de nadie y no tenían dos soles para pagar, porque seguramente se lo gastaron en consumir terokal. Me encontré con esa imagen, yo con mi niño y con dinero, ellos sin dinero pero con vida. Ahí me di cuenta que ellos realmente estaban abrazados de Dios y que vivían colgados no de un hilo invisible como el de nosotros, sino de una soga, bien atados a él. Me dio una lección de amor, un amor de padre impresionante, ellos podían vivir, Dios se llevo al mío, seguramente lo necesitaba mas que yo”.
Se llama Miguel, el que relata la historia. Era director de una agencia de noticias y vivía bien. Luego de la muerte de su niño por un problema congénito, al salir del Hospital del Niño en nuestra ciudad, encontró a dos pequeños que pugnaban por ser atendidos, pero no lo eran por no tener ni dinero ni un adulto responsable de ellos. Miguel pagó los 2 soles de consulta de cada uno de ellos, y no recuerdo bien si uno de ellos murió o no, pero decidieron con su esposa llevar al otro a casa, alimentarlo y cuidarlo. Pero al día siguiente el niño escapó, y él estaba consternado, lamentando la decisión de haberlo llevado a su hogar. Pero al atardecer ese mismo niño trajo a cuatro más, y luego a cuatro más. Es así como Miguel decide buscar un lugar mas grande donde albergar a mas niños. Vendió su casa y todos sus bienes y se trasladó a vivir con sus niños a un lugar despoblado de Lima, al norte de la ciudad, conocido como Zapallal, donde en ese año solamente había arenal.
Iniciaron conviviendo y tratando de subsistir con lo que conseguìan. Pero la casa se fue haciendo enorme por la cantidad de niños que venían de las calles. Construyeron talleres para producir cerámica, cocinas, talleres de carpintería, e incluso un policlínico, que fue fundado por uno de los niños que creciò allí y se graduó de médico.
Han sufrido innumerable problemas, desde robos, incendios, hasta pretensiones de las municipalidades de los distritos aledaños por adueñarse del lugar. Ha sido acusado de secuestro, pedofilia, de esclavizar a niños, y mil cosas mas. Pero siguen ahí, sobreviviendo gracias al apoyo de muchas organizaciones que ahora colaboran con lo que pueden, pero siguen ahí, recogiendo niños de la calle, hijos de presos, de delincuentes, niños negados, que tienen en la casa hogar la Sagrada Familia una pequeña oportunidad en esta vida.
Y por qué no, de tener una Feliz Navidad...
La Comunidad de niños Sagrada Familia es un centro situado en las lomas de Zapallal (Lima, Perú) y que alberga a niños en situación de marginación social y económica.
En la actualidad, un total de 850 niños de edades comprendidas de 0 a 18 años, tienen acceso a la educación primaria, una alimentación adecuada y un futuro lleno de posibilidades, es decir, todo a lo que cualquier niño, sea del lugar que sea, debería tener derecho.
La Comunidad de Niños Sagrada Familia nace en la ciudad de Lima en Mayo de 1988 a partir de la iniciativa de un periodista limeño, Miguel Rodríguez Candia, fundador y actual director de esta institución.
http://www.zapallitos.4t.com
- Autor: Max (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 22 de diciembre de 2016 a las 12:09
- Comentario del autor sobre el poema: Sigo creyendo que el amor puede cambiarlo todo, y que gracias a él, podemos conservar viva la esperanza de un mundo mejor... Feliz Navidad para todos.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 33
- Usuarios favoritos de este poema: JUAN ROMERO SOTELO, nelly h, Alexandra L, yosoyelquesoysiempre
Comentarios6
El amor es la energía más barata y más valiosa a la vez.... y la fuerza que produce esa energía es inconmensurable..!!
Buen relato !!
Feliz Navidad amigo
Exacto! No hay nada mejor que el amor para cambiar el mundo, estimada amiga.
Gracias por pasar y comentar
Felices fiestas
Un abrazo, Max
Max:
Que hermoso relato.
Muchas gracias.
Un abrazo de amistad.
Gracias Fabio. Me alegra que te haya gustado mi relato.
Que tengas un excelente día
Abrazos
Max
Bello, conmovedor, la bondad nace del fondo del alma, igual el amor, compartirlo, ayudar a tener una vida útil a los menos favorecidos, es increíble la satisfacción que se disfruta haciendo el bien. Placer leerte.
Un abrazo, feliz dia, Alex.
Así es amiga. Has dado en el clavo. No hay mayor placer que hacer el bien a otros. Mejor aún, cuando recibes a cambio de ello una sonrisa y un gracias sincero. Y es bueno que el mundo tenga esto, pues son un convencido, que la fuerza del amor puede cambiar al mundo.
Gracias por leerme, y gracias por tus palabras, Me alegra que te haya gustado mi relato.
Un abrazo enorme
Max
Mi amigo justo y bello homenaje, admiro esa entrega del fundador de esa organización. Al igual que vos , creo en el amor como motor del bien y sostén df la humanidad . Te felicito , abrazo
Gracias Fabio. Personas como Miguel, son las que nos devuelven la fe en esta humanidad de miserias y rencores. Al ver tan bellas obras, uno puede volver a sonreír y confiar que el amor, ese motor de nuestras vidas, logrará cambiar al mundo entero.
Que tengas un excelente día, amigo
Un abrazo fraterno
Max
Que hermoso y sensible relato, son historias que llegan al corazón...muy lindo me ha encantado
Un abrazo
LOLA
Me alegra, estimada Lola que haya sido de tu agrado el relato. Es una verdadera historia de amor y entrega admirables, que alimentan la fe y renuevan la esperanza en nuestra tierra.
Gracias por tu presencia y tus palabras.
Que tengas un genial día
Abrazos
Max
Que ptecioso aporte al FESTIVAL y hermosa labor para estoscentros de apoyo a la niñez marginada.un abrazo muy fuerte amigo.
Gracias mi coronela. Con la existencia de lugares así y de personas con tanto desprendimiento y amor, podemos estar seguros que no todo está perdido, que hay un rayito de esperanza en la oscuridad que nos rodea. Está en nosotros ser su soporte.
Un abrazo fraterno
Max
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