Por primera vez sin intervención divina
se rompieron los hielos, y no fue para
iniciar una charla, se inició una guerra
de banderas.
Rusia ansía lo que el fondo del mar
encierra.
Y Canadá instalará bases guerreras,
y a todos esto los Inuits con los que
nadie cuenta, serán solo los convidados
de piedra.
¿Como demonios vamos a salvar la tierra
si envenenámos el mar donde sobreviven
las ballenas?
Algún día lloraremos por haber dejado a
nuestros nietos una naturaleza muerta por
herencia.
- Autor: argantonio ( Offline)
- Publicado: 19 de enero de 2017 a las 16:20
- Comentario del autor sobre el poema: No he estado nunca en el Ártico, pero una vez hice una escala en Anchorage en Alaska y créanme, vi un oso polar disecado dentro de una jaula, esa imagen no se olvida, y me di cuenta de la tragedia que viven los pueblos que viven en estas zonas, y todo por el oro negro, las multinacionales no se paran ante nada.
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 84
- Usuarios favoritos de este poema: racsonando
Comentarios2
Poema y denuncia. Un tema que inspira ¡Si el sol supiera... por qué somos tan ajenos a la tierra!
Buen poema amigo. Abrazos de amistad.
Inspirador
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