QUISIERA VOLAR
Estoy sintiendo tu ausencia
aunque tú no te hayas ido,
me está doliendo tu muerte
sin haberse producido...
Madre, quisiera volar,
para ir hasta el cortijo
y traer hasta tu cama,
agua fresquita del río
y una ramita de encina
y un manojito de trigo
y los campos de amapolas
y pimpajaros floridos...
Con ellos quiero traerte
la vida que ya has vivido,
y que tú, te pongas buena
y que te quedes conmigo.
Madre, se me parte el alma,
no puedo hacer lo que digo.
Madre, no puedo volar,
no puedo ir hasta el cortijo,
ni traer hasta tu cama
agua fresquita del río,
ni la ramita de encina,
ni el manojito de trigo,
ni los campos de amapolas
y pimpajaros floridos...
Madre, no puedo traerte
la vida que ya has vivido,
y tú, ni te pondrás buena,
ni te quedarás conmigo.
Madre, te vas a morir
y yo... ¡no puedo impedirlo!
- Autor: jarablanca ( Offline)
- Publicado: 22 de enero de 2017 a las 17:20
- Comentario del autor sobre el poema: Este es un poema triste, lo escribí hace ocho años, cuando mi madre estaba gravemente enferma. Nunca lo he compartido, pero hoy quiero compartirlo con vosotros. Gracias por leerme. Abrazos.
- Categoría: Familia
- Lecturas: 94
- Usuarios favoritos de este poema: Lolaila, kavanarudén, Ross4, pani, Alexandra L, MANOLO TUA, Mauro Enrique Lopez Z., María C., Alberto Escobar, El Hombre de la Rosa
Comentarios9
¡¡Dios que hermosura!
Y otra vez me haces llorar.
Eres una artista declamando esta belleza de poema.
Un abrazo muy grande.
Gracias, Lolilla. Sé que hablas con el corazón, y desde el mío te doy gracias infinitas y te abrazo.
Hermoso poema.
Me has hecho recordar a mi madre. Refleja perfectamte lo que ella vive, (cada día se apaga más) y la impotencia que vivo yo, sobre todo estando lejos y la imposibilidad de viajar pase lo que pase.
Doloroso, fuerte, triste, pero hermoso.
Un placer leerte, sono siempre Jara querida.
Gracias, amigo. He leído tu poema de hoy y me siento muy cerca de ti... Sé que no puedo aliviar tu dolor, tan sólo acompañarte y aquí estoy, sentadita a tu vera, amigo del alma.
Abrazos.
Tu presencia es gran consuelo. Hay momentos que el silencio, la cercanía son más elocuentes que mil palabras.
Me duele sobre todo la impotencia. Acepto lo que pueda venir, hay que dejar que la natura siga su curso. Nadie es eterno.
Otro abrazo fuerte para ti. Gracias Jara
Jara:
Tristes recuerdos
en este bello poema.
Y con una interpretación
elegante y sentida.
Un fuerte abrazo de osito.
Muchas gracias, Fabio.
Un abrazo grande.
PRECIOSO... SENCILLAMENTE HERMOSO Y ENTERNECEDOR...
Muchas gracias, amigo.
Un abrazo.
Cuanto dolor, tus hermosos versos estremece la pena, emocionan hasta las lagrimas, ese dolor, la impotencia ante lo inevitable de la perdida. Un placer leerte.
Un gran abrazo, Alex.
Sí, el momento de enfrentarse a lo fatalmente inevitable, es duro, muy duro. En ese momento no lloré, mis lágrima las vertí en cada una de las letras de este poema y, después, al leerlo.
Muchas gracias por tu grata presencia, Alex.
Un abrazo grande.
Hermoso poema, lleno de gran delicadeza e inspirada ternura, quien no reaccione a tan delicada pluma, no ha contado con el amor de una madre y máxime si estamos ante su inminente partida, lo cual nos hace impotente porque todos quisiéramos retenerla para nuestra eternidad. Gracias por brindarnos tu hermosa poesía Con tu permiso lo guardaré entre mis favoritos .
Ciertamente creo que jamás me sentí tan impotente como en ese momento... Gracias a ti por tu lectura y generoso comentario.
Un abrazo.
MUCHO SENTIMIENTO Y LO ENTIENDO PERFECTAMENTE
UN BESO
Muchas gracias, Kitty. Nadie mejor que tú, (desgraciadamente) para entender todo el mar de sentimientos que en segundos te arrasa y te ahoga.
Un abrazo muy, muy fuerte.
Es una pena que tenga mos que entender eso por haberlo vivido en directo...pero la vida es así
Un abrazo
Me has recordado al primer Federico. Un abrazo
Muy generoso tu comentario, amigo. Muchas gracias.
Un abrazo y feliz tarde.
Muy hermoso y bien versado tu genial poema estimada Jarablanca...
Un placer su lectura...
Un fuerte abrazo de amistad...
El Hombre de la Rosa
Muchas gracias, poeta.
Un abrazo grande y feliz tarde.
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