Abriste la puerta,
te asomaste como viento suave y agradable,
tomaste asiento, y me perdí intensamente en tu naturaleza;
Fue algo tan exquisito verte:
Cabello caoba, piel caucásica
y un temple penetrante.
Tu dicción era como narcótico para mi alma
aunque parecías modorra por las mañanas,
tu circunspecto siempre estaba a la altura para tu hermosura;
me imagino que tu contrayente está siempre loco por ti.
Para mí conocerte fue como paladear mi mirada;
Mis neuronas no sabían cómo reaccionar
al ver tu coeficiente derramado sobre tu primor.
Todo está perfectamente entrelazado:
tu sonrisa con tu matemática para hablar,
tu mirada con la naturaleza de tu ser,
tu guedeja con el viento que como esporas esparce el dulce olor a ti;
Eres una erudita con sabor a sublimidad beldad
que traspasas la esfera de mi intelecto, pero más de mi corazón.
- Autor: Alejandro Ayalá ( Offline)
- Publicado: 31 de enero de 2017 a las 22:36
- Comentario del autor sobre el poema: Del poemario, Kartas a Karen, Alejandro Ayalá nos presenta el primer poema de su libro. Todos los comentarios son bienvenidos. ISBN 9789996174-03-02
- Categoría: Amor
- Lecturas: 86
- Usuarios favoritos de este poema: nelly h, kavanarudén
Comentarios3
Descripción mágica.
Hermoso.
Muchas gracias don Mario por leerlo y por su comentario.
Poema de mucha exquisitez.... tienes oficio poeta ...!
Un abrazo
Muchas gracias amiga pues pronto subiré más ya que es un poemario que publiqué el año pasado acá en mi país El Salvador. En total son 22 poemas dedicados a ese amor platónico.
Excelente
Un placer leerte poeta.
Un abrazo
Muchas gracias por su comentario y por tomarse el tiempo de leerme e igualmente un abrazo desde El Salvador.
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