Te veo acomodado en mi regazo;
Tan dulce y pequeño
De mis brazos te has hecho dueño,
¡Eres solo un enano descalzo!
¡Pero cómo buscas mi abrazo!
Veo con ternura tus risueños ojos;
Cuando jugando te acurrucas
Mientras mi sonrisa buscas,
¡Entonces, meloso, quieres tus antojos!
¡vivazo! Sabes que por ti ando de hinojos.
La lección de tu hermana es aprendida;
Aunque no creas que siempre cederé
Pues, con ustedes no siempre estaré,
Y antes que la vida nos separe y despida
Sigámonos haciendo, amorosa, compañía.
- Autor: El Corbán (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de febrero de 2017 a las 09:43
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 97
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Sos como trovadores humanos que saben poner las palabras adecuadas en sus hermosas estrofas, estimado amigo El Corbán...
Un placer leer tus letras...
Saludos de tu amigo Críspulo...
Gracias amigo Críspulo.
un placer que te halla agradado.
un fuerte abrazo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.