Entre el ayer y el hoy

I

Ayer, te amé con locura y desenfreno; intenté conquistarte y me despreciaste.

Hoy, veo tu soledad y aunque no lo creas me duele; pero ya no quiero remediarla, quiero que seas feliz pero no a mi lado ya enterré mi amor no valorado.

Ayer, deseaba tenerte entre mis brazos para recorrer tu cuerpo con mis caricias y mis besos rechazados.

Hoy, aunque quisiera tenerte porque sigues siendo hermosa y sensual; no quiero para no sentirme un traidor a mi maltratado corazón;

Entre el ayer y el hoy mi corazón se ha cerrado.

II

Hoy, mi corazón no siente ni ama; porque ya no sale el sol por las mañanas

Ayer, guardaba la esperanza de que en tu corazón recibieras lo que él sentía por ti.

Ayer, mi cuerpo te deseaba, mi mente te pensaba y contigo soñaba.

Entre el ayer y el hoy nada existe en mí que pueda entregarte.

III

Ayer tu alma dura de mi amor se burlaba y tu cuerpo en otros brazos estaba,

Hoy la invitada de siempre la soledad a los dos nos acompaña.

Tú al igual que ayer a tu príncipe azul esperas con ansias.

Yo ayer te esperaba, hoy no espero nada.

IV

Hoy al igual que ayer mi corazón late, para mantener mi ensamble de huesos vivo.

Tu soledad me duele no lo niego, pero me costó tanto olvidarte ayer, que hoy no quiero volver amarte para que no vuelvan los fantasmas y el dolor que me consumía ayer.

Igual como lo hacía ayer, deseo que seas feliz hoy; que te amen como te amé, que te deseen tanto o más que yo ayer.