Anaquín

mabel puertas

Érase una vez un gato

El cual no me conocía,

Pero hablaba y se reía

De su dueño, muy sensato.

 

¡Que si no me dan café,

Se quejaba este felino!

¡Que si no me dan bistec,

Con salsita, que es divino!

 

¡Qué feliz estaba allá

Cada vez que yo llegaba,

Sus patas me acariciaban

Desde encima del sofá.

 

Hacía burlas a su dueño,

Del portátil se apropiaba

Y efusivo conversaba

De la crisis con empeño.

 

Mirándome se quedaba

Preguntándose: ¿qué pasa?

Pero siempre me aguardaba

A que llegara a la casa.

  • Autor: Galicia (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 17 de febrero de 2017 a las 17:23
  • Comentario del autor sobre el poema: Este gato es verdad que no me conoce, pero yo sí a él lo he visto en fotos, es tierno y cariñoso, y casi siempre está presente cuando yo le escribo a su dueño, lo quiero mucho y le dediqué este poema.
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 37
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Comentarios +

Comentarios1

  • Vera Mateos

    Me cae bien tu gato. Gracias por el poema!



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