Mira el sol se esconde detrás del horizonte
reclamando su belleza al natural,
que perdida nostalgia tiene la madre tierra
que ya no verdeara por el manantial.
Seco esta el arroyo que mis pies lavó,
seca están las almas que el fuego se llevó
no fue la clemencia que detuvo tanta furia,
sino una fuerza superior.
Que maldad quema vida,
que maldad ríe sin humor,
que gusano putrefacto distorsiona la realidad
y no teme hacer daño.
Cuanta hipocresía hay en gobernar
fingiendo ser Dios,
Acaso no escuchas los lamentos
de cientos que lloran su dolor.
Mira esos ojos tiernos
que hablan con temor,
mira esas manos teñidas de carbón.
Acaso no ves que están sufriendo
su futuro se quemó.
La esperanza
se perdió entre el humo y el poco aliento
y la angustia llega a tomar su salón.
Mira no hay verde entre los cerros,
y los pequeños se los llevó dios,
Solo quedan cenizas teñidas de dolor
en tierras ya sin vida,
estériles.
Tristes se ven los amplios campos
que una vez fue refugio del sol.
Volverá la esperanza
al son de puño sangriento
del carcomido lomo del ganado solitario.
Algunos tendrán suerte,
otros esperaran clemencia
de recuperar por el tiempo
la verde hierba.
Brotara de nuevo vida
después de las nubes lloronas
sin antes lavar bien el rostro de la madre tierra
sin antes ver que todo se erosionó.
Crecerá la naturaleza, lentamente
Mientras tanto que haces tú,
Finges tristeza
mientras miras detrás del televisor
Cuál es tu aporte?,
cuál es tu pasión?
Te conmueve tu tierra
o eres cómplice de la traición.
No te quedes quieto,
es necesaria tu voz
pero tus manos pueden hacer milagro
solo hazlo!!,
la fe, la mueve Dios.
- Autor: Mina Molina (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 23 de febrero de 2017 a las 22:44
- Comentario del autor sobre el poema: Después de ver y vivir el incendio de mi región.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 87
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