La dama luna gentilmente me obsesiona y atrapa…
aunque sé que con muchos otros poetas me engaña.
Es un misterio grande, inefable… se entrega toda a mí
aunque sé bien que me es infiel con amores sin fin.
La dama luna es mi hermosa compañera, mi hermana,
y con un total e infinito gozo de estrellas me ama.
Es cómplice silenciosa de ilusiones y anhelos,
siempre presente, adorna mis sueños más bellos.
¡Luna en Acuario, con aire de ensoñación me hace fluir!
¡Si estoy sedienta y en bajamar logra mi sonreír!
Si mis playas noctámbulas se agostan y secan,
con sus aguas plateadas a mis estuarios refresca.
Amiga de mi noche, me habla en un lenguaje silente,
en un coloquio de amor interminable, luna creciente.
Disminuye el dolor de la ausencia con su luz brillante…
con su sola presencia amable, luna mía, menguante.
Al verla colgada en el cielo nocturno, pura y feliz,
la dama luna me habla a mí y también te habla a ti.
Es un lenguaje bondadoso y secreto entre los dos…
¡Ella te cantará mi nuevo, creciente y pleno amor!
María Teresa Ruíz Rentería © Todos los derechos reservados.
- Autor: María Rentería (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de febrero de 2017 a las 21:09
- Comentario del autor sobre el poema: Porque la Dama Luna me obsesina y me atrapa...
- Categoría: Amor
- Lecturas: 108
- Usuarios favoritos de este poema: Raquelinamor, ADOLFO CESAR MARCELLO, El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Con razòn la luna en Febrero no ha llegado a mi, porque tu la acaparas con tanto frenesì. Felicitaciones por tu linda y melodiosa prosa llena de imaginaciòn para la luna hermosa que es hogar que guarda nuestras musas. Recibe saludos de unviersal amor de raquelinamor
Gracias por este bello comentario, amiga en las letras, y perdón por acaparar... es que simplemente me enamora. Recibe un abrazo de vuelta, y gracias otra vez.
Te lo mereces!
Un placer pasar por su portal y leer sus hermosos versos estimada María Rentería...
Un abrazo de amistad---
El Hombre de la Rosa
El gusto es mío, amigo de la Rosa, un abrazo de vuelta y un enorme gracias por la visita y el amable comentario.
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