En el manto de tu piel
guardas un tibio secreto,
ahí debajo se esconden
las estrellas con sus luces
iluminando tu alma bella.
La luna te envidia
por robar sus luminosas hijas,
te persigue en las noches
buscando la más bella sonrisa,
las estrellas te esconden
protegiéndote de la luz de envidia.
Tocarte es un paraíso,
sentir el fuego de tu espíritu
recorrer los recovecos curvos
de tu suave seda y miel,
navegar y anclar mis manos
ahí en lo más profundo de tu mar
soñar que eres mi amar.
Las estrellas guardan, callan
sigilosas esperan en el numen
del centro de tu esencia,
viajan eternas y efímeras
esperando ser la inspiración
de ti mi amada.
Mil soles viajan en el ramaje
fino y elegante de tus formas,
en verdad no hay dudas
la mujer que eres deslumbra,
nombras palabras misteriosas
y cautivas mis sentidos
en las lagunas con los enigmas
que aún no resuelvo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.