Con que profundidad de asceta medita el ciudadano murciano de pura casta.
Estirpe nacida de un santa y un paleto, que vive como un ajo de su huerta.
Casi de nada, para si, e indiferente a casi todo.
Aferrado a su silla de esparto en el campo, de la que no se levanta, aunque el mundo este temblando y venga una ola de fuego.
Allí, en su silla, seguirá sentado hasta el final de los tiempos, con los ojos a la corrupción cerrados, y los brazos cruzados como crucificado.
Y cuando le pregunten al murciano por lo que opina que pasa.
Se sentirá agradecido y bendecirá a los que le han robado hasta el aliento.
Angelillo de Uixó.
- Autor: Angelillo de UIxó (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 28 de marzo de 2017 a las 13:24
- Comentario del autor sobre el poema: quiero desmitificar a los murcianos, ahora que están de moda por lo que esta pasando esa región, ya sabéis, eso que de una puta y un gitano nació el primer murciano.
- Categoría: Carta
- Lecturas: 73
Comentarios1
Me he reído un rato, aunque no tiene puñetera gracia. Y ya no es que sea Murcia, Valencia o Madrid... es que aquí está todo muy podrido y no te digo que España, Francia o Italia, es que en este momento, ni un tal "Tato", que debió ser muy íntegro y honrado, se salva, en este mundo o en esta humanidad. Un saludo.
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