CHIQUILLA. A mi amada esposa.

Oye, chiquilla, sí a tí

que estas sentada en la silla

con la carita morena

y los ojos que brillan

corazón de terciopelo

largo el pelo, y las mejillas

flores de colores

tan bonita y tan buena

compará a la azucena

santa y sencilla

eres mi flor, mi semilla

maravilla es tu voz

en ti palpita,

un hermoso corazón

lleno de paz

lleno de amor

eres bendita

piadosa de Dios

Si yo pudiera te daría

amor, risas, alegría

un mundo lleno de color

y mi pobre corazón

que poco vale, no sufriría

y un montón de ilusiones fabricaría

subiendo los escalones

de los andámios de la fantasía

y a montones besos 

que son gratis cada día

¡ Dame la mano !, y cójete

que vamos a volar

en barcos de papel

mirando al mar

sin triste amanecer

y cantar y correr, y soñar

con un paraíso de cristál 

y una fuente para beber

y así poder curar

esta enfermedad

que no nos deja vivir

pero ¡ ríete ya !

cerca esta el fin

del dolor y la soledad

entro de rodillas

para no despertarte

sorbo el aire que respiras

mientras duermes

en la soledad del cuarto 

te contemplo, cual retrato

y me admiro y suspiro

de tu belleza palpable

tanto amor te debo

que tiembla el aire

y una lágrima resbala

por mi oscura carne

cién balas han atravesado

mi corazón, y no sale sangre

¡ cuanto te quiero !

solo Dios lo sabe

te miro y te admiro

tu bondad es la llave

que cierra y que abre

este corazón mío

pon la mano en la llaga

la herida,infectada

y la espina clavada

este madero, este calvario

llevado a diario

como triste pregonero

y digo lo que siento

no me tapes el pensamiento

deja que el remordimiento

recorra su sendero

y haga vereda a diario

marcando en el calendario 

el rumbo del velero

la sal en el salero

y la pena en su sitio

la fé que tanto quiero, 

es gratis no cuesta dinero.

Un beso ¡ te quiero!.